El consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza, ha mantenido esta mañana un encuentro con los alcaldes y alcaldesas de Oláibar (Mª Carmen Lizoáin), Odieta (Alberto Urdaniz), Anue (Miguel Ángel Larráyoz) y Lantz (Isabel Baleztena) para informarles sobre la planificación de las obras del segundo tramo de la N-121-A que se transformará en una vía 2+1.

Los trabajos en el trayecto comprendido desde Olave / Olabe hasta Lantz comenzarán el próximo 30 de abril, una vez que se realicen las actuaciones previas de señalización y preparación. Las obras, que serán ejecutadas por la empresa Construcciones Mariezcurrena S.L. y cuentan con un presupuesto de 10,8 millones de euros, se plantearán por fases y tramos y no será necesario ejecutar desvíos completos de la calzada. Únicamente se limitará la velocidad de circulación a 60 kilómetros por hora y se reducirá la anchura de la banda de circulación, por lo que es previsible que se produzcan retenciones.

En determinadas fases de la obra será necesario ocupar parte de la calzada por lo que se habilitarán tramos de paso alternativo por el carril que quede despejado, donde se limitará la velocidad a 40 km/h. Con el fin de que la afección sea menor, se prevé la ejecución de estos trabajos de forma escalonada, llevando a cabo una única actuación semanal de paso alternativo, coincidiendo con los días con menor intensidad de tráfico.

Estos tramos de paso alternativo coincidirán con la fase inicial de ejecución del drenaje transversal, en la que se establecen tuberías de suministro y evacuación de agua a uno y otro lado de la calzada, y con la fase final de obra durante la extensión de las capas de firme.

Modificaciones en la carretera

Los trabajos de conversión de la N-121-A se han dividido en 5 tramos, desde los túneles de Ezcaba hasta el puente de Endarlatsa, en el límite de Navarra con Guipúzcoa. El primer tramo (Ezcaba-Olave) se encuentra en construcción desde el pasado mes de febrero.

El proyecto permitirá transformar la carretera en un diseño 2+1, que consiste en vías de doble sentido de circulación con tres carriles disponibles, de forma que el carril central se utiliza como adelantamiento en una u otra dirección, a través de intervalos regulares separados del otro sentido de circulación por una mediana no rebasable.

La solución vía 2+1 está muy extendida internacionalmente y ha demostrado su eficacia en cuanto a seguridad vial y funcionalidad. Sus principales ventajas son que suprime el 100% de los adelantamientos con circulación en sentido contrario, lo que reduce significativamente el riesgo de colisión frontolateral, que es la causa más lesiva de la accidentalidad actual de la N-121-A. Además, permite disipar las colas con mayor facilidad, ya que se optimizan las zonas de adelantamiento.