El Servicio Navarro de Empleo - Nafar Lansare (SNE-NL), organismo dependiente del Departamento de Derechos Sociales, ha dado un nuevo impulso al programa Escuela Sectoriales de Aprendices (ESA), iniciativa dirigida a formar a futuros trabajadores y trabajadoras con la implicación directa de los sectores empresariales. La consejera de Derechos Sociales, Carmen Maeztu, ha presentado las líneas esenciales de esta novedosa propuesta dirigida principalmente a jóvenes en desempleo, en el transcurso de una jornada que ha sido clausurada por la directora gerente del SNE –NL, Miriam Martón.

“Con este programa todas las partes salen ganando, las empresas pueden orientar la formación a su actividad y los cambios que necesitan introducir para ser más competitivas y atender las nuevas demandas de la sociedad, y las personas tienen el incentivo de una formación remunerada o con compromiso de contratación. Ese proyecto es muy ilusionante para cualquiera”, ha señalado Maeztu. “El empleo, especialmente en el caso de las personas con mayores dificultades, es un factor determinante para la inclusión y participación plena en la sociedad”, ha concluido la consejera.

Puesto en marcha hace dos años junto a Volkswagen como experiencia piloto, y desde principios de 2021 con la cooperativa agraria AN, la experiencia adquirida en estas primeras actuaciones ha servido para su promoción entre asociaciones sectoriales del entorno de la Corporación Empresarial Navarra (CEN), logrando que progresivamente se vayan interesando en este programa sectores fundamentales de la Comunidad Foral, como el sociosanitario; el de hostelería, a través de AEHN; el de mantenimiento, con Saltoki; o el de reparación de vehículos, a través de la Asociación Navarra de Talleres de Reparación de Vehículos (ANTRV). Estas dos últimas entidades van a arrancar ahora en septiembre con varios itinerarios que ofrecen una formación especializada en un entorno real y adaptada a las necesidades de las empresas, a la par que promueven y suscriben un contrato de trabajo con una duración de entre uno y tres años.

En la jornada, que ha tenido lugar esta mañana, han participado exponiendo sus experiencias representantes de VW, AN, Saltoki y ANTRV. Asimismo, han asistido para conocer esta propuesta entidades empresariales como ACEN, FNLC, Lares, ANET, Cámara de Comercio, APMEN o ANEL, así como otras entidades responsables del impulso de las Políticas Activas de Empleo (SEPE, CCOO, UGT, LAB y CEN).

La innovación de este programa surge al combinar y reforzar políticas y medidas de diferentes administraciones para impulsar la formación y el trabajo en entornos laborales, de común acuerdo con los sectores empresariales. Además, este enfoque de agrupación sectorial permite aunar las necesidades de personal de las empresas, sobre todo de las pymes, para organizar más eficazmente la formación y la contratación de sus futuros trabajadores.

“El resultado, ha remarcado Miriam Martón, “es un itinerario de colaboración público – privada que articula todos los procesos: orientación profesional, preselección de alumnado, formación inicial y empleo, este a través de un contrato de formación y aprendizaje previo a la contratación en prácticas o indefinida”. “En el marco de este trayecto, hay por parte del SNE-NL asistencia al diseño técnico, ayudas a la formación, subvenciones al fomento del empleo, así como bonificaciones a la Seguridad Social”, ha explicado la directora gerente del SNE-NL.

A través de este programa se espera formar este otoño a unas 200 personas desempleadas sin cualificación, prioritariamente jóvenes menores de 25 años y colectivos con mayores dificultades de acceso al empleo, como personas con discapacidad y en situación de vulnerabilidad.

Energías renovables y reparación de vehículos

El grupo Saltoki es uno de los que se ha acogido al programa y tiene previsto su lanzamiento de forma inminente. En su caso, el proyecto incluye siete acciones de formación con compromiso de empleo en el ámbito de la instalación de equipación de energías renovables (climatización e instalaciones solares fotovoltaicas), tres de ellas en Tudela y el resto en Pamplona / Iruña, en la que se espera la participación de 140 personas.

En cuanto a la Asociación Navarra de Talleres de Reparación de Vehículos (ANTRV), los grupos se formarán a través de este proceso en mantenimiento de carrocerías (chapa y pintura), con un total de 30 personas, y pendiente de ampliarse próximamente a otras 30 para formación en electromecánica. De este modo, a través de estos itinerarios se pretende formar a unas 200 personas entre las dos entidades, de las cuales un 40% como mínimo pasarían a las Escuelas de Aprendices con un contrato laboral, dando así a las empresas una mayor garantía en cuanto a la selección, el desarrollo profesional y la competencia de los futuros trabajadores.

El papel del Servicio Navarro de Empleo –Nafar Lansare- es el de dinamizador, impulsor, coordinador y en parte financiador de estos itinerarios de formación y empleo. Para que este itinerario funcione y genere empleo estable, este año ha lanzado ayudas de hasta 4.400 euros para las empresas que realicen contratos de formación y aprendizaje y de entre 4.000 y 10.010 euros a quienes realicen otro tipo de contratos, dependiendo de la duración o del colectivo contratado. En total se va a realizar una inversión en estas dos Escuelas Sectoriales de Aprendices que ahora arrancan de casi 300.000 euros.

Solo en acciones formativas, y en lo que va de año, la partida presupuestaria del SNE-NL que nutre tanto Escuelas de Aprendices como otras líneas de formación con compromiso de empleo alcanza los 500.000 euros concedidos a un total de 10 entidades, con una participación de más de 300 personas y casi 3.500 horas de formación.

El programa, al detalle

Una vez determinadas las necesidades de los sectores, el SNE-NL y las empresas inician la selección de candidaturas. A partir de ahí, las empresas tienen dos opciones. En la primera incorporan directamente a sus plantillas a las personas desempleadas a través de la  modalidad de contrato de formación y aprendizaje. Este tipo de contrato, de entre 1 y 3 años de duración, está bonificado por la Seguridad Social y el SEPE financia la formación del certificado de profesionalidad. Es obligatorio que las personas dediquen el 25% de la jornada laboral en el primer año y del 15% en los dos siguientes a esta formación.

En la segunda opción que se ofrece, las personas desempleadas pueden ser formadas previamente con compromiso de contratación, en una acción formativa subvencionada que consta de unas 300 horas a lo largo de un trimestre y que culmina con la contratación del 40% de los participantes. Las ventajas de esta vía son evidentes, ya que la formación se diseña a la medida de las necesidades de la empresa y se anticipa el proceso de selección, puesto que se puede escoger a los alumnos y alumnas más adecuados de entre los participantes en la acción formativa. El itinerario se complementa con prácticas no laborales o incentivos a la contratación temporal, transformación en indefinida o directamente indefinida.

Para capacitar a los trabajadores, los sectores podrán recurrir a la oferta formativa del Departamento de Educación, a cursos del SNE-NL, a otros centros formativos privados o incluso con medios propios debidamente constituidos. De hecho, y como consecuencia derivada del impulso del SNE-NL, el programa Escuelas de Aprendices está auspiciando el nacimiento de centros formativos sectoriales, tipo a la Volkswagen Academy. La cooperativa agraria AN y Saltoki están terminando de acondicionar instalaciones con este fin.

La formación continua de los trabajadores, una oportunidad derivada de las EESS

En el transcurso de la jornada, la Confederación Empresarial Navarra, junto con el SNE-NL, ha presentado una nueva oportunidad derivada de este programa de EESS y que puede resultar de interés también para las diferentes Escuelas Sectoriales que se vayan creando. En alianza entre las dos instituciones, se promueve, apoyando tanto técnica como económicamente, la generación de formación de reciclaje específico del sector,  agrupando intereses de empresas del mismo área. Es decir, se oferta una formación conjunta por sectores empresariales, dirigida en este caso a trabajadores, y financiada a través de los fondos que FUNDAE (Fundación Estatal para la Formación en el Empleo) dispone para este fin a través de la bonificación de las cuotas de la seguridad social.