La Policía Nacional detuvo está semana en Pamplona a un ciudadano argelino de 31 años y en situación irregular, como presunto autor de la receptación de dos teléfonos móviles que habían sido sustraídos en Sevilla y Madrid. Se da la circunstancia de que ambos móviles le habían sido, a su vez, hurtados por dos personas de origen polaco en Zaragoza, que posteriormente partieron en tren hacia Pamplona, en donde fueron interceptados por la Policía Foral.

Los hechos tienen su origen en la Estación de ferrocarril de Zaragoza, en donde se encontraba el súbdito argelino, que sufrió el hurto de su mochila por parte de dos individuos. De inmediato interpuso una denuncia en la Policía Nacional en Zaragoza, que con enorme rapidez pudo determinar que los dos presuntos autores habían tomado un tren dirección Pamplona.

Al llegar a la Estación pamplonica, les estaban esperando la Policía Foral, procediendo a la detención de ambos ciudadanos polacos, que 

presentaban claros síntomas de embriaguez, y que llevaban encima uno de los móviles hurtados. Horas después aparecería la mochila con el resto de pertenencias del argelino, entre ellas el segundo móvil.

Los investigadores de la Policía Nacional pudieron determinar que, en realidad, los dos móviles hurtados figuran como sustraídos en Madrid y Sevilla. Por ello, cuando el ciudadano argelino se acercó a Pamplona a recoger sus pertenencias fue, así mismo, detenido, como presunto autor de la receptación de ambos teléfonos móviles.

Los tres implicados en los hechos han quedado en libertad con cargos a la espera de juicio.