EN LA ISLA DE TENERIFE
La Policía Nacional detiene a 20 personas y desarticula una organización dedicada al tráfico de inmigrantes y drogas
Trasladaban a los inmigrantes desde la costa occidental de Marruecos hasta el archipielago canario en embarcaciones precarias en las que también introducían hachís. Con la operación policial se ha evitado la salida inminente de una patera con, al menos, doce inmigrantes.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en la isla de Tenerife a 20 personas y han desarticulado una organización criminal dedicada, presuntamente, al tráfico de inmigrantes irregulares y al tráfico de drogas entre Marruecos y España. La organización trasladaba a los inmigrantes desde la costa occidental marroquí hasta el archipiélago canario en embarcaciones precarias en las que también introducían hachís. Con la operación policial se ha evitado la salida inminente de una patera en la que iban a viajar al menos 12 inmigrantes. A las 20 personas detenidas -14 de nacionalidad marroquí y seis de nacionalidad española- se les imputan delitos de tráfico ilegal de personas, tráfico de drogas y otros delitos contra el patrimonio.
Pateras con inmigrantes y drogas
Tras diversas gestiones, los agentes pudieron constatar la existencia de un entramado criminal asentado en la isla de Tenerife que se dedicaba, presuntamente, a introducir inmigrantes irregulares mediante embarcaciones desde la costa occidental marroquí hasta el archipiélago canario.
Los agentes también han podido corroborar que el entramado criminal utilizaba los viajes para introducir en las embarcaciones sustancias estupefacientes. Los agentes estiman que el beneficio obtenido por la organización podría ascender a más de 300.000 euros.
Operativo policial en dos fases
El operativo policial se ha desarrollado en dos fases. En la primera fase se desmanteló parte de la organización criminal cuando se disponían a realizar un intercambio de un kilo de cocaína por 30 kilos de hachís y una importante suma de dinero en efectivo.
Los investigadores acreditaron, además, la presencia de un migrante llegado en patera a Gran Canaria, que había sido trasladado por los detenidos a la isla de Tenerife. Trabajaba en el restaurante que regentaba uno de ellos sin contrato de trabajo y vivía en un trastero situado en la planta baja, que carecía las mínimas condiciones de habitabilidad (sin luz, ventilación, aseo, etc), en una situación precaria.
En la segunda fase se ha desmantelado, de manera definitiva, el entramado criminal y se ha evitado la salida inminente de una patera desde Marruecos con unas doce personas. Además, los migrantes eran utilizados para realizar la descarga de la sustancia estupefaciente que era trasladada.
Los agentes han llevado a cabo un total de nueve registros domiciliarios en la isla de Tenerife en los que se han incautado unos 50 kilogramos de hachís, 1,5 kilogramos de cocaína, 63.870 euros en metálico, seis vehículos, una motocicleta, 12 terminales telefónicos y diversa documentación.