OPERACIÓN LLEVADA A CABO EN MADRID Y EN LLEIDA
La Policía Nacional desarticula un grupo criminal dedicado a estafar a compañías aseguradoras simulando robos de vehículos
Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro personas en Madrid y Lleida como presuntos integrantes de un grupo criminal especializado en estafas a compañías aseguradoras.
Para ello, simulaban los robos de vehículos y, posteriormente, cobraban las indemnizaciones correspondientes, obteniendo con ello grandes beneficios.
Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de abril, tras una inspección llevada a cabo en una nave industrial de Lleida, en la que se localizó un vehículo de alta gama que figuraba como sustraído el día anterior en la localidad de madrileña de Alcobendas, y el cual se encontraba con los asientos removidos, las puertas laterales y el capó retirados y con evidentes muestras de manipulación.
Las gestiones policiales permitieron averiguar que el denunciante y usuario del coche había simulado la sustracción del mismo, actuando en connivencia con las personas que estaban desguazando el coche en Lleida. Igualmente, se comprobó que también se había denunciado los robos de otros vehículos.
El objetivo de estas conductas ilegales era obtener un beneficio ilícito al percibir una indemnización de la compañía aseguradora. Para ello, utilizaban distintos modus operandi con vehículos siniestrados y piezas de los mismos con la intención de evitar ser descubiertos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, así como por los departamentos de fraudes de las compañías aseguradoras.
Tras robar un vehículo, denunciaron que había sido calcinado
Este grupo criminal había adquirido, igualmente, un vehículo siniestrado en Alemania. Posteriormente, robaron otro similar en España y lo matricularon con la documentación del primero. Tras lograr asegurarlo fraudulentamente en una compañía aseguradora, denunciaron que había sido calcinado, cobrando entonces la indemnización. Al automóvil le habían quitado previamente las piezas de valor.
Posteriormente, volvieron a adquirir otro coche de la misma marca siniestrado, y lo usaron para matricular otro vehículo similar, con el cual repararon el vehículo siniestrado. Una vez reparado, denunciaron su robo con el fin de cobrar, de nuevo, la indemnización y volver a usar sus piezas.
Una vez descubierto el modus operandi, los agentes continuaron realizando gestiones de investigación y recopilando información tanto de la Dirección General de Tráfico como de las diferentes compañías aseguradoras, procediendo posteriormente a practicar las cuatro detenciones por los delitos de robo de vehículos, estafa, simulación de delito y pertenencia a grupo criminal.