El Gobierno de Navarra concierta 246 plazas para atención a personas con enfermedad mental
El Gobierno de Navarra ha aprobado la firma de un concierto con la congregación Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, para la atención a personas con enfermedad mental en la Clínica Psiquiátrica Padre Menni de Pamplona / Iruña y en el Centro Hospitalario Benito Menni-Benito Menni Ospital Zentroa, de Elizondo, que supondrá un aumento de 23 plazas respecto a las actuales. Así el número total de plazas concertadas será de 246, de ellas, 138 en Pamplona y 108 en Elizondo, con un coste anual de 7.1 millones de euros.
De las 23 nuevas plazas, 15 son de atención residencial para personas mayores dependientes (10 en Pamplona y 5 en Elizondo), destinadas a personas de plazas de enfermedad mental o de psicogeriatría que ya no requieren tanta especificidad en su atención porque han cedido los trastornos de conducta. Con esta modalidad, podrán pasar a plazas de mayores sin tener que cambiar de centro, si ese es su deseo.
También se incorporan 5 plazas de atención residencial en Pamplona, específicas para personas con trastorno mental orgánico, inexistentes hasta ahora y un piso supervisado en Elizondo, con tres plazas para personas con discapacidad, que pasarán de vivir en un centro a llevar una vida autónoma en una vivienda.
Las consejeras de Derechos Sociales y Salud han visitado esta mañana el centro que las Hermanas Hospitalarias tienen en el barrio de la Rochapea de Pamplona para mantener un encuentro con los responsables del mismo.
La consejera Maeztu ha señalado que “en este concierto se adaptan las ratios al nuevo decreto que regula el funcionamiento de los centros sociosanitarios y se sigue avanzando en la implantación de la atención centrada en las personas, sostenida sobre principios como la normalización, la desinstitucionalización, la participación, la atención integral y personalizada, la formación continua del personal, la accesibilidad universal, la igualdad y la promoción del voluntariado”.
Por su parte, la consejera de Salud, Santos Induráin, ha explicado que “pone en valor la alianza entre recursos privados y públicos de diferentes departamentos, con el fin último de mejorar la calidad de vida de las personas. Una colaboración sustentada en procedimientos acordados de intercomunicación, de coordinación, de seguimiento y de evaluación de los procesos asistenciales”. Asimismo, ha destacado la importancia de la continuidad de cuidados y la recuperación de la persona en su contexto natural.
Finalmente, Purificación Pardo, superiora de las Hermanas Hospitalarias en Navarra ha recordado que la congregación lleva en nuestra comunidad desde 1904, trabajando en el campo de la salud mental, de manera coordinada con las administraciones públicas, para poder llegar al conjunto de la sociedad, sin distinciones. “Valoramos mucho la duración de este concierto, con la posibilidad de renovación, ya que nos permite desarrollar nuestra tarea con una visión a largo plazo”. Señaló, así mismo, que la salud mental sigue siendo un gran reto en nuestra sociedad.
Al mismo tiempo, la directora gerente de los dos centros de la congregación, Miryam Zabalza, se mostró convencida de los beneficios que aporta el hecho de que se trate de un concierto conjunto con los Departamentos de Derechos Sociales y Salud, “aporta un valor añadido porque se da respuesta de forma integral a las necesidades de apoyo de las personas y nos permite atender situaciones muy complejas, tanto clínicas como sociales”.
Una inversión de 64.2 en 9 años
La inversión por parte del Gobierno de Navarra será de 7,1 millones anuales, y un total de 64.196.005,29 euros para los nueve años de duración del concierto. La financiación es compartida por Derechos Sociales, que aporta 52.610.020,56 euros, y Salud, que destinará 11.585.984,73 euros. El nuevo concierto entra en vigor el 1 de junio de 2021.
El concierto contempla distintas modalidades: atención residencial, vivienda ligada a residencia, centro de rehabilitación psicosocial, atención residencial a personas con trastorno mental orgánico, en piso supervisado para personas con discapacidad intelectual y atención residencial a personas mayores y con necesidad de atención psicogeriátrica, con estos recursos concertados.
Del presupuesto previsto, se destinará a mayores un importe de 22.506.822 euros; a enfermedad mental, un total de 29.444.817,6 euros; y a discapacidad otros 658.380,96 euros. La atención sanitaria asumida por el Departamento de Salud supone un importe de 11.585.984,73 euros, con cargo a su partida de “Programas, proyectos y coordinación con la ANADP” (Agencia Navarra de Autonomía y Desarrollo de las Personas, organismo dependiente de Derechos Sociales).
La Congregación de Hermanas Hospitalarias lleva atendiendo a personas con enfermedad mental desde principios del siglo pasado. Mantiene contratos con los Departamentos de Salud y Derechos Sociales para la atención de personas con trastorno mental desde el año 1991, siendo el último contrato de 2013, con una duración máxima de cuatro años, aunque ha continuado prestando dicho servicio hasta hoy.
Desde el Departamento de Derechos Sociales se considera necesaria la continuidad de la atención a las personas con enfermedades mentales graves y personas con necesidad de atención psicogeriátrica en los diferentes recursos que la Congregación de Hermanas Hospitalarias cuenta en sus centros.