Agilizar la cartera del SNS exige evaluación "predecible" y más coordinada
Los sectores farmacéutico y tecnológico analizan qué es necesario para simplificar estos procesos
El Instituto Nacional de Excelencia para la Salud y la Atención del Reino Unido, NICE por sus siglas en inglés, ha puesto en marcha un cambio en la forma de evaluar nuevos medicamentos, dispositivos, diagnósticos y tecnologías digitales para brindar un acceso más rápido a los pacientes.
Aunque por el momento este sistema sea muy distinto al que existe en España, tanto Farmaindustria como la Federación Española De Empresas De Tecnología Sanitaria (Fenin) analizan qué se podría hacer para acelerar este acceso a los fármacos y productos sanitarios, como una mayor implicación de las comunidades autónomas o la puesta en marcha de un procedimiento de evaluación y financiación "predecible".
La 'transformación' del NICE pasa por simplificar trámites y permitiendo una toma de decisiones de evaluación "más flexible", pero sin "dejar de ser sólidos y receptivos". Así, en este cambio, un panel de expertos decidirá qué tratamientos, dispositivos médicos, procedimientos de intervención y diagnósticos se evaluarán, de forma que las decisiones de selección serán "más claras, coherentes y transparentes". "También hemos simplificado los criterios para las evaluaciones de enfermedades muy raras, incluida la eliminación de los criterios de que la afección que se está tratando debe ser crónica y gravemente discapacitante", dice el Instituto.
Fenin ha explicado a Redacción Médica que los sistemas de financiación o reembolso de las tecnologías “difieren entre los distintos países y por ello no es fácil extrapolar los procedimientos de financiación que se aplican en un país a otro”. En el caso de España, la cartera de servicios no detalla cada una de las técnicas quirúrgicas, ni modelos organizativos, ni tecnologías concretas, sino que incluye descripciones muy genéricas de forma que no supongan un freno a la incorporación de nuevas tecnologías.
En España, la cartera de servicios no detalla cada una de las técnicas quirúrgicas ni tecnologías concretas |
En el caso de que se tuviera que solicitar la incorporación de una nueva tecnología no cubierta por ninguna de las descripciones genéricas o que implique un elevado coste económico o una modificación sustancial de un diagnóstico o un tratamiento, se debe iniciar el procedimiento de solicitud puesto en marcha por el Ministerio de Sanidad y a través de la red de tecnologías sanitarias se evalúa la seguridad, la efectividad, la calidad, la utilidad terapéutica, el coste- eficacia de las prestaciones, el cuidado de grupos menos protegidos o de riesgo, las necesidades sociales, su impacto económico y organizativo, garantizando también su equidad.
“Desde nuestro punto de vista, este proceso podría agilizarse a través de una mayor implicación de las comunidades autónomas, los profesionales y las empresas y una mejor coordinación de las agencias de evaluación”, indica la Federación.
Procedimiento de evaluación "predecible"
Por su parte, Farmaindustria ha manifestado a este medio, sin entrar a valorar si es posible o no un 'NICE español' ni el cambio que ha llevado a cabo, que mejorar el acceso a los nuevos fármacos en España "pasa por habilitar un procedimiento de evaluación y financiación predecible y eficiente".
"De manera que todos los expedientes deberían sean resueltos en el plazo que fija la norma (180 días); pasado este tiempo, los medicamentos financiados estarían a disposición de los pacientes del sistema sanitario público y los no financiados podrían ser comercializados en el mercado privado. De esta forma, se limitaría la tensión que en la asistencia sanitaria y para los pacientes produce un alargamiento en el tiempo de acceso", indica Farmaindustria.
El nivel de acceso de los pacientes españoles a los nuevos medicamentos está en la media europea, pero es inferior al de los grandes países de la Unión Europea (Alemania, Reino Unido, Francia e Italia), según el informe anual Indicadores de acceso a terapias innovadoras en Europa (W.A.I.T. Indicator), elaborado por la consultora Iqvia a petición de la Federación Europea de Asociaciones de la Industria Farmacéutica (Efpia).
POR CLARA HERNÁNDEZ