Arranca el proceso participativo para el codiseño de la reurbanización de la plaza de Santa Ana
23 de abril de 2024 (14:19 h.)
La primera sesión, abierta a la ciudadanía, tendrá lugar el jueves 25 de abril, a las 18.30 horas en Plazara
El próximo jueves 25 de abril el Ayuntamiento de Pamplona, a través de la sociedad pública Pamplona Centro Histórico, presentará en Plazara el proceso de codiseño de la plaza de Santa Ana. Un procedimiento que busca la participación ciudadana y un concurso de ideas para la reurbanización de un espacio emblemático del Casco Antiguo. La primera reunión tendrá lugar, a partir de las 18.30 horas, en la sala Sintagma del centro comunitario.
El proceso participativo abarcará un año, desde este mes de abril hasta abril de 2025. El debate sobre el futuro de la plaza de Santa Ana se inició en los años 80 como parte de un ambicioso plan que proponía liberar las manzanas del Casco Viejo y recuperar el espacio del interior. Desde esa época, hace más de cuarenta años, se han llevado actuaciones graduales, desde la adquisición de inmuebles hasta modificaciones en el planeamiento urbanístico, pasando por iniciativas de urbanismo táctico o la participación de la comunidad en su apropiación como en el caso del huerto urbano de la Piparrika.
En la actualidad, está en tramitación una modificación del PEPRI que propone cambios en varias alineaciones de edificios y posibilita la rehabilitación de inmuebles en lugar de la demolición prevista. Asimismo, surgen nuevas ideas para la revitalización de edificios del entorno, como la cesión de viviendas para proyectos de acción social, como el House Lead, o propuestas con estudio de fachadas e integración en el paisaje urbano en la zona de las viviendas de la calle Jarauta del número 7 al 21.
Estas iniciativas en materia de vivienda se entrelazan con la futura propuesta de usos para la plaza. En 2007 se planteó un proyecto que proponía dos plantas de estacionamiento subterráneo y otras dos de galería comercial, así como la renovación de los edificios que rodean la plaza como un gran bloque. Los nuevos paradigmas de sostenibilidad y movilidad hacen necesario repensar y reflexionar sobre los usos que se quieren dar al espacio público de la plaza de Santa Ana.
Proceso participativo a lo largo de un año y en tres fases
El proceso participativo se desarrollará a lo largo de un año en tres fases, con el objetivo de lograr la participación efectiva de la ciudadanía en la futura reurbanización de la plaza de Santa Ana, garantizando una amplia diversidad y la representación de los distintos colectivos de la zona y del barrio. La primera fase, que se inicia el jueves, está encaminada no tanto a definir soluciones como a plantear de forma participativa un modelo de plaza idóneo, a identificar los deseos, valores y necesidades que la ciudadanía proyecte sobre ese espacio. La intención es que el resultado de ese proceso inspire a los equipos de diseño del concurso de ideas.
En otoño, se prevé licitar el concurso de ideas, con el objetivo de proponer un plan de actuaciones para la transformación y reurbanización del ámbito de la plaza de Santa Ana y su replanteamiento mediante un proceso de codiseño. En paralelo, se pretende llevar a cabo un proceso de sensibilización, difusión y participación ciudadana. Será la segunda fase en la que, una vez obtenidas las propuestas finalistas del concurso de ideas, se buscará reflexionar de forma participativa sobre los proyectos concretos y su grado de respuesta a las demandas de la ciudadanía obtenidas en la primera fase, así como realizar una nueva recogida de aportaciones para el futuro desarrollo del proyecto. Se organizará para ello una exposición permanente en Condestable, así como sesiones informativas y talleres.
La tercera y última fase consistirá en la evaluación del proceso participativo realizado. La evaluación se realizará de manera individual de cada una de las sesiones y talleres y de manera continua en todo el proceso, con indicadores cualitativos y cuantitativos. De esta forma, se desarrollará un proceso de reflexión colectiva entre las personas participantes en torno al proceso participativo que aportará un valor añadido al mismo en relación a las expectativas que genera este proceso y el resultado final.
El proceso participativo abarcará un año, desde este mes de abril hasta abril de 2025. El debate sobre el futuro de la plaza de Santa Ana se inició en los años 80 como parte de un ambicioso plan que proponía liberar las manzanas del Casco Viejo y recuperar el espacio del interior. Desde esa época, hace más de cuarenta años, se han llevado actuaciones graduales, desde la adquisición de inmuebles hasta modificaciones en el planeamiento urbanístico, pasando por iniciativas de urbanismo táctico o la participación de la comunidad en su apropiación como en el caso del huerto urbano de la Piparrika.
En la actualidad, está en tramitación una modificación del PEPRI que propone cambios en varias alineaciones de edificios y posibilita la rehabilitación de inmuebles en lugar de la demolición prevista. Asimismo, surgen nuevas ideas para la revitalización de edificios del entorno, como la cesión de viviendas para proyectos de acción social, como el House Lead, o propuestas con estudio de fachadas e integración en el paisaje urbano en la zona de las viviendas de la calle Jarauta del número 7 al 21.
Estas iniciativas en materia de vivienda se entrelazan con la futura propuesta de usos para la plaza. En 2007 se planteó un proyecto que proponía dos plantas de estacionamiento subterráneo y otras dos de galería comercial, así como la renovación de los edificios que rodean la plaza como un gran bloque. Los nuevos paradigmas de sostenibilidad y movilidad hacen necesario repensar y reflexionar sobre los usos que se quieren dar al espacio público de la plaza de Santa Ana.
Proceso participativo a lo largo de un año y en tres fases
El proceso participativo se desarrollará a lo largo de un año en tres fases, con el objetivo de lograr la participación efectiva de la ciudadanía en la futura reurbanización de la plaza de Santa Ana, garantizando una amplia diversidad y la representación de los distintos colectivos de la zona y del barrio. La primera fase, que se inicia el jueves, está encaminada no tanto a definir soluciones como a plantear de forma participativa un modelo de plaza idóneo, a identificar los deseos, valores y necesidades que la ciudadanía proyecte sobre ese espacio. La intención es que el resultado de ese proceso inspire a los equipos de diseño del concurso de ideas.
En otoño, se prevé licitar el concurso de ideas, con el objetivo de proponer un plan de actuaciones para la transformación y reurbanización del ámbito de la plaza de Santa Ana y su replanteamiento mediante un proceso de codiseño. En paralelo, se pretende llevar a cabo un proceso de sensibilización, difusión y participación ciudadana. Será la segunda fase en la que, una vez obtenidas las propuestas finalistas del concurso de ideas, se buscará reflexionar de forma participativa sobre los proyectos concretos y su grado de respuesta a las demandas de la ciudadanía obtenidas en la primera fase, así como realizar una nueva recogida de aportaciones para el futuro desarrollo del proyecto. Se organizará para ello una exposición permanente en Condestable, así como sesiones informativas y talleres.
La tercera y última fase consistirá en la evaluación del proceso participativo realizado. La evaluación se realizará de manera individual de cada una de las sesiones y talleres y de manera continua en todo el proceso, con indicadores cualitativos y cuantitativos. De esta forma, se desarrollará un proceso de reflexión colectiva entre las personas participantes en torno al proceso participativo que aportará un valor añadido al mismo en relación a las expectativas que genera este proceso y el resultado final.