Y UN DÍA LLEGA ALGUIEN QUE CONFÍA EN TI Y TE DA UNA SEGUNDA (O TERCERA) OPORTUNIDAD

Nuevas oportunidades. IMAGEN DE ARCHIVO

Tu eres dueño de tu vida, la llevas como puedes, mejor o peor pero la llevas.

Conoces la droga, juegas con ella y llega el día en que ella empieza a jugar contigo... 

Tienes un brote psicótico, te diagnostican una enfermedad mental y tu vida deja de ser tuya... 

Recorres diferentes recursos, te institucionalizan y acabas por ver tu vida pasar como si fuera ajena, como si fueras un mero espectador en la que sólo se te permite opinar pero no decidir.

Vives en un centro lleno de gente similar donde nada te motiva, donde te sientes solo a pesar de estar rodeado continuamente... 

Y de repente un día alguien cree en tí, te viene a buscar y te dice que eres importante, que quiere conocer tu historia y no leerla de un papel.

Te ofrece ser el protagonista de tu vida, contarla al mundo en primera persona y hacerlo desde un escenario.

Te ayudan, te forman, te cuidan, eres un actor.

Entras en una locura de ensayos que te hacen sentir vivo y cuando vas allí eres uno más pero no uno menos y eso te hace ser lo q quieres ser.

Estrenas la obra después de muchos ensayos y la gente se pone en pie para aplaudir y eso te hace sentir vivo.

Por un rato recuperas tu vida, recuperas tu nombre, te sientes JJ, Peio, Gali o Simón, vuelves a ilusionarte con algo y eso se contagia.

Quieres demostrar y demuestras que vales, que eres útil, que no eres un parásito, un estorbo.

Vuelves a vivir.

 

Marta Goicoechea Luque