Las películas ‘Un film dramatique’ de Éric Baudelaire y ‘Apiyemiyekî’ de Ana Vaz comparten el Gran Premio del XIV Festival Punto de Vista
El Premio Jean Vigo a la mejor dirección ha sido para Lawrence Abu Hamdan por ‘Once Removed’, y ‘Now, at Last!’, de Ben Rivers, se lleva el galardón al mejor cortometraje
El jurado internacional de la decimocuarta edición de Punto de Vista, Festival Internacional de Cine Documental de Navarra, ha concedido ex aequo el Gran Premio Punto de Vista a la Mejor Película a las obras ‘Un film dramatique’ de Éric Baudelaire y ‘Apiyemiyekî?’ de Ana Vaz. La entrega de premios ha tenido lugar durante la ceremonia de clausura del Festival, celebrada hoy en Baluarte, a la que ha asistido la consejera de Cultura y Deporte Rebeca Esnaola.
El jurado, formado por Haden Guest, Simon Field y Hila Peleg, considera que ‘Apiyemiyekî?’ es “una evocadora y lírica película que inventa un nuevo lenguaje de superposición para seguir el trabajo de un activista de derechos humanos que descubre la oscura y todavía vigente historia de crímenes genocidas contra pueblos indígenas de la Amazonia brasileña”. ‘Apiyemiyekî?’ de Ana Vaz recibe el Gran Premio Punto de Vista a la mejor película en reconocimiento de su “impresionante meditación sobre el frágil poder de la memoria colectiva y la necesidad urgente de justicia social”.
‘Un film dramatique’ es, según el jurado, “una reveladora y verdadera colaboración entre un animado grupo de estudiantes de secundaria y el cineasta Éric Baudelaire”. ‘Un film dramatique’ consigue el Gran Premio Punto de Vista a la mejor película con una especial mención “a su retrato de grupo entretejido con habilidad, de un notable grupo de jóvenes cuyas diversas y emergentes voces y visiones se convierten en una emocionante y virtuosa declaración sobre la singular capacidad del cine para permitirnos ver y escuchar el mundo que habitamos e inventamos" y por "darnos la esperanza de que el mundo puede, de hecho, ser un lugar mejor”.
El Premio Jean Vigo a la Mejor Dirección, dotado con 5.000 euros, ha sido para Lawrence Abu Hamdan por ‘Once Removed’. Para el jurado Lawrence Abu Hamdan ha conseguido algo que “es muy poco frecuente: que una película pueda asombrar y enseñar al mismo tiempo”, y sus miembros alaban “su brillante e imaginativa síntesis de las espinosas respuestas que definen la historia de la guerra civil libanesa”.
‘Now, at Last!’, de Ben Rivers, se lleva el Premio al Mejor Cortometraje, dotado con 3.000 euros. Una obra que es “un absorbente retrato de un perezoso de Costa Rica” que supone “una alegre y profunda oda al tiempo cinematográfico”. El jurado felicita a Ben Rivers “por recordarnos que la exuberancia cinematográfica puede ser tan profunda como la sobriedad documental”.
Premios especiales
El Premio Especial del Público a la Mejor Película, dotado con 1.650 euros, ha recaído en ‘Overseas’ de Sung-a Yoon, mientras el Premio de la Juventud a la Mejor Película, dotado con 1.500 euros, ha sido para ‘Queen’, de Kathryn Elkin, “por su potencia, por la empatía que transmite al público y su capacidad de apelar a nuestro presente, a la vez abriendo la puerta al futuro. Por su autenticidad, su humor y su espontaneidad”, virtudes que sirvan para hacerse también con una mención especial del jurado, que concede otra a ‘Aquí y allá’, de Melisa Liebenthal.
X Films
Por otra parte, el jurado de la convocatoria del Proyecto X Films –Dario Oliveira, Nathalie Trafford y Cristina Cámara Bello–, que han conocido los tres proyectos por escrito y luego en exposición pública realizada por sus autores (Alberto Gracia, Laida Lertxundi y Maider Fernández Iriarte) han decidido seleccionar ‘Tengan cuidado ahí afuera’, de Alberto Gracia.
El jurado destaca que en esta edición de Proyecto X Films, que coincide con la celebración de su décimo aniversario, “el reto que se nos planteaba era la elección de un solo proyecto de tres tan desafiantes como representativos de la heterogeneidad que vive el cine en este tiempo, y que tan bien defiende este festival”. Han elegido ‘Tengan cuidado ahí afuera’, “por su apuesta por lo político en este tiempo convulso”. El proyecto toma como punto de partida la subcultura punk y la juventud de los años 80 en Pamplona “para traerla al presente y reflexionar sobre la pérdida de referentes”.