Aprender medicina, farmacia, derecho o magisterio a través del arte
El MUN ha celebrado hoy una jornada en la que una veintena de profesores de la Universidad de Navarra y profesionales del Museo han explicado proyectos docentes desarrollados a través de la Colección y las actividades del MUN
Cuando hablamos de docencia, pensamos en un aula. En el caso del arte, en esculturas, pinturas, espectáculos. Son aparentemente mundos separados. Sin embargo, el arte sí conecta con la actividad docente e investigadora, brindándole nuevas posibilidades para el aprendizaje y el descubrimiento, en cualquier disciplina o área de conocimiento.
Así lo han atestiguado una veintena de profesores e investigadores de la Universidad de Navarra, en la jornada “Museos al servicio de la docencia, educación e investigación”, que se ha celebrado hoy en torno al Día Internacional de los Museos y en la que han participado cerca de 300 asistentes, presenciales o conectados por streaming. Asimismo, la grabación de la Jornada estará disponible íntegramente en el canal de Youtube del Museo Universidad de Navarra en los próximos días.
Durante sus intervenciones, los ponentes han explicado su experiencia de enseñar o investigar a través de la Colección o Programación artística del MUN. También han intervenido algunos de los profesionales del Museo que promueven la investigación de los artistas, dando a conocer su particular proceso de estudio y creación.
Marta Frago coordina el programa en Producción de Artes Escénicas que la Facultad de Comunicación imparte junto con el MUN. Destaca el valor de que el alumno no sólo trate la teoría, sino de que se vincule directamente con la práctica artística: a través de la relación con artistas y profesionales del sector, o de profesores que dirigen obras escénicas a la par que enseñan.
“El maletín de Tàpies” unió a estudiantes de la Escuela de Arquitectura, con profesionales y con personas con necesidades especiales. Consistió en el diseño y creación de material de mediación de la obra L’esperit català, de Tàpies (perteneciente a la colección MUN) para proporcionar una experiencia artística a personas con dificultades visuales. María Angélica Martínez, profesora de la Escuela, habla de la “colaboración continua” entre las alumnas del Grado en Diseño implicadas y el equipo del MUN, de su participación en un “proyecto real”, que les permitió formarse en inclusión, así como utilizar metodologías y elementos de enseñanza como el learning by doing, la investigación-acción y los laboratorios. La propuesta, presentada el pasado febrero, se enmarcó en el programa SociARTE, que pone el Museo al servicio de las entidades sociales navarras, y contó con la colaboración de Fundació Antoni Tàpies, Fundación ONCE y Fundación “la Caixa”.
También ha encontrado el sentido didáctico de L’Esperit català Mercedes Galán, profesora y decana de la Facultad de Derecho, “para ilustrar a los alumnos sobre las diversas formas de expresar los sentimientos políticos”, al analizar la trayectoria histórica de las Comunidades Autónomas. “La experiencia les enriquece y pueden comprobar que el derecho, la historia y el arte recogen, de distintas formas, unos mismos sentimientos y una realidad”, cuenta.
Apolinar Varela, de la Facultad de Educación y Psicología, coincide en el valor del trabajo interdisciplinar. La asignatura Expresión corporal y su didáctica persigue acercar a sus estudiantes a los museos y las artes escénicas para mejorar sus competencias artísticas y expresivas, mediante la asistencia a talleres y espectáculos del MUN. “Es un recurso didáctico de primer nivel”, opina. Y señala el valor añadido de poder romper con las “dinámicas de siempre. Es motivador, permite conocer nuevos enfoques, ideas. Además, permite generar nuevas sinergias y conexiones que quizá antes no se exploraban”.
Los docentes hallan en el MUN la oportunidad de que sus alumnos profundicen en la parte más humana de su profesión. “El arte nos permite conectar con nuestros sentimientos y, al mismo tiempo, usar nuestra mente y conectar con el paciente. Inicialmente, los estudiantes podrían pensar sólo en el aspecto científico, pero la Medicina es mucho más grande que eso: incluye llegar a la otra persona. En lugares como este, podemos unir ambos campos y pueden darse cuenta de que todo esto es parte de ser médico”, explica el doctor José Pereira, de la Facultad de Medicina. Coincide con él el doctor Carlos Centeno, que desarrolla un taller sobre compasión y empatía, como parte del programa de Identidad Médica de la Facultad, ante obras como Incendi d’Amor (Tàpies), de la colección MUN. “Combina la reflexión sobre obras de arte con testimonios reales, creando una experiencia de aprendizaje transformadora. Elegí estos recursos porque el arte facilita la introspección y la conexión emocional, elementos esenciales en la formación médica”, explica.
LA APORTACIÓN DEL MUN, MÁS ALLÁ DEL CAMPUS
La contribución del Museo en el área docente e investigadora trasciende la Universidad de Navarra. Es el caso del taller de arteterapia para profesionales de cuidados paliativos que ha explicado María Arantzamendi, investigadora del Instituto Cultura y Sociedad (ICS), realizado en colaboración con la Sociedad Navarra de Cuidados Paliativos.
El resto de proyectos que se han dado a conocer en la jornada pertenecen a un amplio abanico de áreas y facultades: Medicina (ciencia, literatura e Inteligencia Artificial), Ciencias (del Big Bang al cerebro humano, por la vía de la belleza), Farmacia y Nutrición (cómo se traducen los colores a notas musicales), Arquitectura (el arte del juego; escenografía y Service Design), Filosofía y Letras (divulgación en el MUN, artes escénicas en Literatura y Escritura Creativa, experiencias con los clásicos de literatura en el Museo) e Instituto Lengua y Cultura Españolas (aprender un idioma a través del arte).