Alumnado de la Escuela de Música y Danza Arte y Discapacidad de Fundación Atena expone sus más recientes creaciones en la Casa de la Juventud
‘Navarra a color’ es una nueva propuesta de artes plásticas que se podrá visitar hasta el 31 de julio
‘Navarra a color’ es una nueva propuesta de artes plásticas de Fundación Atena en la Casa de la Juventud. La sala de exposiciones acoge, hasta el 31 de julio, 16 de cuadros realizados por el alumnado del taller que se realiza cada año en la Escuela de Música y Danza Arte y Discapacidad de Fundación Atena. Sus alumnos son personas con discapacidad intelectual entre 4 y 68 años.
La muestra quiere ser un homenaje a Navarra desde una perspectiva diferente, a través de unos cuadros pintados con colores vivos y llamativos. Ofrecen un recorrido de norte a sur, a través de diferentes lugares y monumentos emblemáticos de Navarra. Un viaje a lugares significativos para reflejar la diversidad y belleza del paisaje navarro: pueblos pirenaicos, desierto, zona media y el Camino de Santiago. Son lienzos en dos tamaños, formato 116x 73 cm y 4 de 65 x 54 cm., pintados con técnica de témpera.
No es la primera vez que se realiza una exposición de Atena en la Casa. En 2014, 2015 y 2016 se expusieron obras realizadas en talleres monográficos sobre los pintores Delaunay, Romero Britto y Matisse, respectivamente. Fruto de la colaboración entre Fundación y Ayuntamiento la Unidad de barrio de Etxabakoitz alberga el cuadro ‘Rythm de la exposición. Movimiento, color y ritmo’, una obra de gran formato del alumnado de Atena basada precisamente en el taller realizado sobre Delauny.
Atena es una fundación privada sin ánimo de lucro, creada en 2001 por un grupo de familiares de personas con discapacidad para promover y fomentar el desarrollo integral de las personas con discapacidad intelectual a través del arte, mejorando su calidad de vida y acompañándoles en su proyecto vital. Nació con el objetivo de fusionar arte y pedagogía ya que a través del arte se posibilita la expresión de las facultades humanas y se desvela la estrecha relación entre la actividad intelectual, la sensibilidad y la expresión corporal. Así se favorece la integración de todas las personas, independientemente de su edad, sexo, condición social, psicológica o física. Además, el arte sirve como vehículo de comunicación, de expresividad y emotividad, en este caso para las personas con discapacidad intelectual.