La aportación de las universidades a las empresas en el ámbito de la sostenibilidad fue la clave de la sesión impartida por María Iraburu, rectora de la Universidad de Navarra, este martes en Tudela. Bajo el título “Empresa, Universidad y Sostenibilidad”. La jornada fue organizada por la Asociación Empresa Ribera, AER, y contó con la participación de Rafael Loscos, presidente de la Asociación, y de Gonzalo Oliver, director general de Enhol. En el evento se analizó la sostenibilidad, los retos que supone para las empresas, y cómo el ámbito académico puede contribuir a su aplicación. Durante el mismo, la rectora explicó que el Centro BIOMA que está impulsando la Universidad de Navarra “nace como un lugar de encuentro y de transformación donde la sociedad y las instituciones buscan juntas respuestas y soluciones a los desafíos más urgentes desde la Ciencia, poniéndola al servicio de las personas y la propia naturaleza”.

En su presentación de la jornada, el presidente de la Asociación Empresa Ribera, Rafael Loscos, destacó que “Centro BIOMA es una revolución que conjuga mundos poco conectados de manera valiente e innovadora, en lo que será sin duda un polo de progreso para nuestra comunidad y por ende para nuestra Ribera”

La progresiva incorporación del término “sostenibilidad” al debate social se ha ido traduciendo en normas, que también afectan a las empresas. Para Gonzalo Oliver, director general del Grupo Enhol, “uno de los mejores ejemplos de la sostenibilidad es la empresa familiar que trabaja el presente para preservar el futuro”.

En ese contexto, la rectora analizó la manera en que la Unión Europea está enfocando la innovación como Deep Innovation. “La universidad puede contribuir a la sostenibilidad empresarial desde su propia actividad docente: formando perfiles profesionales orientados hacia la sostenibilidad, sea cual sea su grado universitario, además de con programas específicos diseñados para formar profesionales en esos nuevos roles”, afirmó María Iraburu. 

La otra dimensión en la que la universidad puede contribuir a la sostenibilidad empresarial es la investigación, según la rectora del centro navarro. “Este ámbito supone un reto y una oportunidad que requiere cercanía para conocer cuáles son las necesidades reales de las empresas y las posibilidades de colaboración de los grupos de investigación de modo que se trabaje en proyectos de investigación con un doble objetivo de carácter académico y práctico. Para ello, es necesario un conocimiento mutuo, en el que la empresa tiene que entender los tiempos y las exigencias de la investigación. Hay empresas que, por ejemplo, contratan un estudio y otras que hacen una apuesta a largo plazo y con más impacto, por ejemplo, financiando cátedras o doctorados de empresa”, explicó María Iraburu. En última instancia, puntualizó, también es necesaria una adecuación de la metodología para que se pueda avanzar hacia una investigación aplicada que suponga un valor añadido para la empresa.

Para explicar estas vías de colaboración entre empresa y universidad, Iraburu presentó el Centro BIOMA, uno de los proyectos centrales de la Estrategia 2025 de la Universidad de Navarra, que está plenamente comprometido con un futuro sostenible. El Centro BIOMA, que se construirá en el Campus de Pamplona durante los próximos años, es un proyecto que aúna investigación, docencia, divulgación y educación ambiental y científica en la naturaleza en un único espacio. El nuevo edificio de Patxi Mangado, de 13.000 m2, albergará el Instituto de Biodiversidad y Medioambiente, el Museo de Ciencias, la actividad docente de las facultades de Ciencias y Farmacia y Nutrición, así como iniciativas de innovación y emprendimiento a través de Innovation Factory. “Se trata de un lugar en el que personal investigador, alumnado, empresas y público de distintas generaciones puedan entrar en contacto a través de una pasión compartida por la ciencia y la naturaleza”, concluyó María Iraburu.